Autor: Ferrán Martínez y Albert Kadmon
Páginas: 102
Tapa: Blanda
Editor: Pathosformel
“En los últimos años se han divulgado montones de perfiles homicidas, una serie de listas y gráficos que pretenden delinear el carácter de un asesino habitual. ¿Y sobre el perfil de la víctima perfecta? Existen, con tanta seguridad como existimos nosotros, y avanzan del mismo modo inexorable hacia su destino prefijado.” Poppy Z. Brite. El arte más íntimo
El psicópata ya tiene en la mira a Albert Kadmon y está dispuesto a ir a por él, solo necesita esperar el momento adecuado y este llega un día en que la abuela del objetivo sale de casa. Tras unos golpes en el rellano, Kadmon ha quedado inconsciente, y el asesino, con mucho esfuerzo, ya que su víctima padece obesidad mórbida, lo traslada al baño donde lo ejecuta y le corta la cabeza.
Poco tardaron en enterarse las autoridades, que sin demora se personaron en la escena del crímen. Casualmente un inspector de los mossos andaba cerca del lugar, y tras dejar a su hijo Marcos en el fútbol acude sin demora. Narcís el forense también se ha presentado e inmediatamente ordena que se lleven el cadáver para la morgue.
El inspector sabe que se enfrenta a un peligroso psicópata y Narcís está afligido porque no puede concluir su autopsia debido a la ausencia de cabeza en el cadáver. El agente recibe una fotografía donde se ve un misterioso hombre cerca de la escena del crimen. El individuo iba vestido con un sombrero, una gabardina muy al estilo Neo de Matrix y por debajo una camiseta de My Little Pony.
Diego, un yonqui del barrio posee datos que pueden ayudar al inspector a dar con el asesino, pero la información tiene un precio, y en el caso del adicto es un rollo entero de papel aluminio. Nuestro policía se presenta en el lugar de la cita y para su sorpresa se encuentra con el adicto decapitado y un inquietante mensaje que le hace temer lo peor.
Los temores del mosso se confirman cuando al llegar a casa descubre que su hijo Marcos ha desaparecido. Sabe que se lo ha llevado el psicópata de la camiseta de My Little Pony y el tiempo apremia, la vida del niño está en peligro y es cuestión quizá solo de unas horas. En una carrera contra reloj, asesino y agente comenzarán una cacería, ¿quién atrapará a quién? ¿quién se convertirá en la víctima perfecta?
Víctima Perfecta es un relato escrito por Albert Kadmon y Ferrán Martínez que podría catalogarse como splatterpunk. Para quienes no lo sepáis, este género surgió como un movimiento dentro de la ficción de terror de los años ochenta y se caracteriza por una representación demasiado gráfica de la violencia.
El libro está narrado a dos voces, la del asesino y la del inspector, cada uno aportando su propia perspectiva de los acontecimientos y siempre en primera persona. Son los personajes que llevan el hilo conductor de la historia. En cuanto a la ambientación, los autores nos hacen sentir una atmósfera inquietante y a la vez un tanto opresiva que por momentos es dejada de lado para hacer sitio a situaciones surrealistas, absurdas y cargadas de un humor muy muy negro y corrosivo.
En cuanto a los personajes, comencemos por el inspector. En esta figura tenemos a un hombre un tanto egocéntrico y vanidoso que disfruta de dar caza a criminales. En casa su situación es tensa, ya que las discusiones con su esposa son una constante, sin embargo, es un padre que ama a su hijo por sobre todas las cosas y está dispuesto a dar la vida por él, este detalle de la personalidad del mosso me ha encantado. Cuando la vida de su hijo está en juego, el agente no teme a encarar la muerte con tal de salvarlo. En una parte, este hombre, enfurecido contra el asesino, menciona “no voy a permitir que nadie traumatice a mi hijo, excepto yo y tal vez su madre”. Esta frase nos da una pequeña idea del humor negro que abunda en el relato.
Marcos es un niño con obesidad infantil, que confía ciegamente en su padre y siente hacia él mucha admiración. Es un niño que tiene muchos miedos, pero cuando ve a su progenitor en peligro, no duda ni un segundo en hacer una jugada, lo digo literalmente, para salvarle la vida. Narcís, nuestro forense, es un hombre que vive para su trabajo, extremadamente perfeccionista, a tal grado que no considera completa una autopsia hasta no tener las cabezas de los cuerpos, llegando al obsesionarse con ello.
Por último hablemos del asesino, quien es el personaje más complicado y extraño de la historia. Conforme vamos leyendo el relato contado desde su perspectiva nos damos cuenta de que es un narrador no confiable. Estamos ante un sujeto que padece un trastorno obsesivo compulsivo, que disfruta atacando y agrediendo a personas en las redes sociales valiéndose de perfiles falsos. Es un sujeto que además de ser un psicópata, padece de un trastorno narcisista y de perversiones sexuales tan depravadas que harían sentir sobrecogido al mismísimo Marqués de Sade, con eso os digo todo.
El sujeto en cuestión tiene además una personalidad contradictoria, un sujeto capaz de llevar a cabo una carnicería sin sentir siquiera el menor remordimiento, pero que es fan de My Little Pony. Un sujeto muy inteligente, frío y calculador, pero que le gusta consumir drogas y que tiene unos hobbies un tanto extraños. Vamos, un individuo que haría las delicias de Sigmund Freud.
En la historia nos vamos a encontrar algunas referencias a autores y obras del género del splatterpunk, así como referencias en tono mordaz a situaciones de la actualidad y a algunos autores y sus obras. Debo aclarar que no es un libro para cualquiera, si sois personas de estómago delicado o que os horrorice la violencia gráfica, entonces descartad el libro, ya que aquí os vais a encontrar con escenas muy explícitas tanto de violencia, como en perversiones sexuales. Los mismos autores incluyen la advertencia en las primeras páginas.
Por último agradecer a la editorial Pathosformel y a Kadmon el envío del ejemplar y por haberme dado a conocer esta historia tan fuera de lo común y con bastante que analizar en cuanto a la personalidad del asesino. Solamente deciros que si os gusta el splatterpunk y buscáis una historia surrealista, extrema y extraña, solamente estáis a un click de haceros con ella.
¡Hola!
ResponderBorrarPues no conocía la obra, aunque sí el género y me ha llamado mucho la atención. Es verdad que me tengo que concienciar mucho cuando me pongo con él, pero me suele gustar. Me quedo con la recomendación, gracias.
Un abrazo!! ^,^!
ELEB 💜
Hola
ResponderBorrarMira que lo que cuentas se me hace interesante, pero admito que soy muy cobarde y si hay por ahí niños, me lo pienso mucho. Gracias por compartir
Un bes💕